miércoles, 9 de junio de 2010

Miley Cyrus llega a España tratando de dejar atrás a Hannah Montana



Bronceadísima, con la larga melena suelta, unos pantalones negros ceñidos y un top abierto que dejaba ver debajo el sujetador oscuro, la cantante y actriz Miley Cyrus se presentó hoy en Madrid con una imagen propia de una estrella del rock, alejada del personaje de Hannah Montana que desde la televisión y el cine la lanzó a la fama y la convirtió en ídolo de niñas y adolescentes.
"Ahora soy yo misma", explicó la estadounidense en rueda de prensa. "Estoy tratando de crear mi propia personalidad, mi propia imagen". Ha madurado, dice, pero eso no significa que reniegue del adolescente de Disney. "Estoy muy orgullosa de él, porque inspiró a muchas jóvenes", dijo. Pero su tiempo parece haber pasado ya.


Tras haber vendido 15 millones de copias de sus anteriores trabajos en todo el mundo, la jovencísima artista se encuentra ahora en España para presentar su nuevo disco, "Can't be Tamed". Sale a la venta el 22 de junio y en él, con una imagen más sexy y provocadora, intenta hacer ver a su público que a sus 17 años ha crecido.


El primer concierto de su carrera en España lo ofrecerá el próximo 6 de junio en el marco del festival Rock in Rio de la capital española, después de haber actuado la semana pasada en el mismo festival en Lisboa.


Y el próximo viernes, además, estrena en las pantallas españolas su última película, "The Last Song" (La última canción), un drama romántico basado en la novela "A walk to remember" (Un paseo para recordar), de Nicholas Sparks, en el que Cyrus aparece convertida en una adolescente rebelde neoyorquina, reacia a pasar las vacaciones de verano con su padre en una pequeña ciudad costera del sur.


En una concurrida rueda de prensa en un lujoso hotel de Madrid al que llegaron fans intentado conseguir alguna foto de la artista, Cyrus anunció que está ya preparando una nueva película. Además, acaba de crear una línea exclusiva de ropa para las tiendas Walmart junto al diseñador Max Azria.


Con tantos proyectos en marcha, admite que su trabajo no le deja mucho tiempo libre. "Me gustaría viajar más, pero para ver bien los sitios que visito". Y desearía también tener algo más de tiempo para una afición que dice que se está despertando en ella: la fotografía. "En el futuro me gustaría dedicarle tiempo".


Sobre su nuevo disco, que se mantiene en el pop adolescente, asegura que le ha servido "un poco de terapia" en medio del crecimiento y la madurez que está adquiriendo. "He podido expresar lo que pienso y lo que siento", explicó sobre un álbum que calificó como "el más sincero" de todos los que lleva publicados hasta ahora.


Fan confesa de Radiohead, aún no se decide ella misma a incursionar en el rock por ser un género que considera un poco alejado de la edad de sus seguidores, a los que sitúa entre los 12 y los 18 años. "En las actuaciones en vivo sí añado un poquito de rock", dijo.


Y asegura querer utilizar su música para luchar contra la discriminación. "He dedicado una canción a mi mejor amigo, que es mi peluquero, y es gay", puso como ejemplo, reseñó DPA.


Cantar en inglés ante fans hispanohablantes no le preocupa en absoluto. "El idioma no es una barrera. Aunque cante en inglés, mis fans en Latinoamérica cantan conmigo", y está convencida de que será igual en España, cuando actúe en Rock in Rio.


"Soy una persona muy espiritual, mi religión gira en torno al amor", acabó definiéndose. "El amor creo que es lo que falta en este mundo, y es por eso que siempre trato de hablar de amor en todas mis canciones", aseguró.

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